El pasado 17 de febrero Kutxi Romero & Jatajá publicó su primer e ilusionante trabajo, ‘Raigambre’. Más que un disco, que efectivamente lo es, yo lo consideraría más como un proyecto bonito que nace y muere a la vez.Producido por Kolibrí Díaz (Marea), el disco ha sido grabado, mezclado y masterizado por el propio Kolibrí, con la inestimable ayuda de Fran Ramírez, en espaciados intervalos de tiempo durante los meses comprendidos entre la primavera y el invierno de 2008 en los estudios Sonido R-5 de Larragueta (Navarra).
‘Raigambre’ lleva por título un trabajo que ve la luz gracias al empeño y tenacidad del bueno de Kutxi Romero, quien, con la edición de este disco, ve su sueño cumplido de juntar sus dos pasiones, el rock y el flamenco, aunque muchos flamencos avispados piensen aquello de ‘¿Qué haces aquí si nadie te ha dado vela en este entierro?'. Y es que 'Raigambre' es justamente eso, una mezcla potente de rock y flamenco sin precedentes, un conjunto de orígenes y raíces que han llevado a Kutxi a ponerle boca y voz a los flamencos Jatajá.
Ya avisaba en su día Romero, que esto no iba a ser un disco convencional, ni lo más parecido a Marea, sino que se trataría de un proyecto diferente y difícil de escuchar, tan costoso que requería su cuna y su tiempo para mecerlo, un período largo de tiempo que me ha llevado cinco meses para poder reseñarlo.
Por encima de todo, cabe destacar que es un disco largo (13 canciones), cuya duración total abarca los 70 minutos aproximadamente, cosa que dificulta digerirlo rápidamente y que, por tanto, carezca de ligereza auditiva, puesto que una de las características distintivas que arroja el disco es la fuerte temática de sus letras, todas ellas bajo la impronta imborrable e inmejorable de Kutxi Romero, y la gran musicalidad que acompaña a cada una de ellas. No en vano, para hacer más fácil su digestión y buscar acomodo a los temas, el disco cuenta con diversas colaboraciones que resaltan aún más el trabajo realizado. A las ya previstas de Alén Ayerdi a la percusión y la de Kolibrí Díaz y Cesar Ramallo a las guitarras eléctricas para aportar una tonalidad más fuerte y agresiva a los temas, se suma la bonita voz de la navarra Naiara Ruz, protagonista en Mi mula nunca duerme, canción que abre el disco y que se ha convertido en el primer single por su simplicidad cautivadora. Otra colaboración es la de Miguel Campello ('elbicho'), voz en Donde menos duela, convirtiendo a esta canción en una de las mejores del disco sin lugar a dudas por la energía que desprende y porque a 'elbicho' le viene como anillo al dedo. Delirio (alud de humo), con Maite Aguinaga al violín, es otro de los temas más bonitos del disco. Precedido por las palabras asustadizas del polifacético Albert Plà que sirven para recitar un pequeño fragmento extraído del libro Carta de vagamundos de Miguel Sánchez-Ostiz, contiene tres vaivenes musicales diferentes que te transportan simultáneamente a distintos estados sin moverte de la misma canción, todo ello gracias a sus cinco minutos de duración y a los altibajos que guarda.
Ante la tesitura flamenca que recoge el disco, no podía faltar un flamenco de raza para ponerle la guinda al pastel, y quien mejor para hacerlo que el señor José Dominguez ‘El Cabrero’, quien nos deleita con un fandango natural para introducir el tema Despeñasueños, con Rafael Rodríguez a la guitarra flamenca. Otra de las aportaciones flamencas que encontramos en el disco es la de Ángel Ocray, quejíos, cajón flamenco, palmas y voz en La cuna de los poetas, el tema más corto de todos en el que Kutxi nos regala su profunda voz recitando unos cuantos versos.
Finalmente, tratándose de algo que Kutxi se traía entre manos hace tiempo, no podía faltar en el disco un homenaje a Rosendo Mercado y a sus Leño. Prueba de ello es la particular versión que realizan del conocido por todos Maneras de vivir para cerrar y despedir un proyecto sencillamente bonito, pero que, en mi opinión, quedará en el olvido con el paso del tiempo.
Ahora, sólo me resta dar las gracias a Kutxi por habernos aportado su genialidad como letrista y a los Jatajá por habernos hecho soñar con su música.
EL COMPADRE WILLY (http://compadreorock.blogspot.com/)
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